Attila fue uno de los grandes hacedores en las artes visuales de Argentina, considerando al dibujo como un oficio. Tuvo códigos propios y se identificó con la esencia de lo nacional. Como dibujante figurativo, se dedicó a explorar las formas del cuerpo humano, ubicándolo en distintas situaciones, pero siempre con una mirada crítica del mundo.

   Estudio con los mejores. Fernández, Antonio Pujía, Luis Barragán, Aída Carballo, Aurelio Macchi, Pablo Edelstein, y Osvaldo López Chuhurra se encuentran entre sus maestros. Y con su intensa actividad docente formó generaciones de nuevos artistas y discípulos.